Esa niña tiene pensamientos de sicario

Centroamérica se desangra, aunque no hay guerras declaradas tal y como las entendemos a modo de conflicto armado. Una violencia cotidiana, sin importar su apellido, ya sea a causa del narcotráfico, pandillas, extorsión, sicariato... ofrece cifras diarias de muertes como si de un enfrentamiento armado se tratase. Y en Guatemala, heredera de heridas de una guerra intestina que las desigualdades no dejan que cicatrice, ya no queda, al menos, sangre que derramar; aunque sí palabras.

La violencia no solo engendra violencia, sino también arte. La poesía, como una flor aferrada a una mínima esperanza en una grieta de un techo de cemento, surge de la misma agonía, aunque sea una rosa que no sabe si vivirá o será cortada y con su muerte, adornará la caja funeraria. Así lo escribe una niña con pensamientos de sicario... o lo que es lo mismo, Ruth Vaides.

Ruth, escritora de alma sicaria, nos regala la crudeza de una realidad, la guatemalteca y por extensión, la centroamericana, envuelta en seda o terciopelo en su poemario esa niña tiene pensamientos de sicario.

Unos poemas en verso libre, inspirados en las situaciones que se viven a diario en las ciudades; ya pueden ser de Guatemala, Honduras, El Salvador o de cualquier país donde las desigualdades solo se superan buscando otro horizonte en cualquier lugar o con dinero fácil; pues ya no hay oportunidades para salir a flote. Como dice Ruth en su poema Triángulo norte, tres naciones llenas de poquísimas esperanzas; un pedazo de tierra que está contaminado de corrupción y penas.

Centroamérica es considerada como una de las regiones con mayores índices de violencia a nivel global. Por lo general, al hablar sobre la violencia de la región, existe una consistencia discursiva que gira en torno a tres graves problemas, cuyo entramado innegablemente mina la convivencia armónica de nuestras sociedades: los homicidios de hombres jóvenes, las pandillas y el narcotráfico. Sin embargo, existe un universo de violencias que permanece a la sombra de nuestra consciencia, deber y actuar social. Su incidencia permea los cimientos del avance hacia el desarrollo de sociedades justas, pacíficas e inclusivas, aunque esto en Centroamérica ya no sabemos si es una utopía o quimera. Nos referimos al universo de las violencias contra las mujeres; de los proyectiles que atraviesan la piel de la espalda desnuda de las muchachas, en palabras de Ruth.

No sabemos qué tanta distancia haya entre tener pensamientos de sicario o sencillamente serlo, pero comenzamos a creer que, a las mujeres de Centroamérica, y de Guatemala no les queda otra alternativa pues la vida, la sociedad, el contexto, la familia, la iglesia, los políticos, TODOS (nótese en masculino), las avoca a tener pensamientos sicarios. Helena Galindo, una de las prologuistas de este poemario, describe a Ruth como una dama que se viste de sicario. Definitivamente las mujeres de Centroamérica son damas vestidas de sicario.

Ruth es una poeta única, aunque su parentela la ve como la oveja sucia de la familia; o al menos eso dice ella. Y su poesía es dulcemente áspera, como si un guante de seda nos golpeara hasta hacernos sangrar, aunque ya no haya sangre que derramar.

Ruth nos evoca los poemas de Juana Pavón, poeta hondureña ya fallecida. Ruth dice, como especie de peligro en extinción, que aquí está, única e irrepetible, irremplazable e inevitablemente, sola. Juana decía “escúrguenme lo exacto. Les demostraré cuan EXACTA soy”. Ambas engendran poemas que son como pájaros y son como balas; cantan y explotan, tal y como expresa Regina José Galindo, otra de las prologuistas de este poemario.

Leer Esa niña tiene pensamientos de sicario nos incita al rompimiento de nuestra conciencia acomodada, nos zarandea; los poemas de Ruth son como esa bala que lleva nuestro nombre escrito; y no sabemos si nos mata o sana nuestras heridas, porque ya no hay sangre que derramar.

Porque en el fondo, como Ruth, también tenemos pensamientos de sicario.

Esa niña tiene pensamientos de sicario es una publicación de Ruth Vaides, Ana Libertad Sigüenza la ilustró y Parutz’ Editorial la publicó en 2022.

Ruth Vaides nació en 1973. Es poeta y cuentista guatemalteca. De sus publicaciones poéticas podemos mencionar los libros Con Versos de Calibre Ignorado, publicado por Proyecto Editorial La Chifurnia en 2017, El Pequeño Teatro de la Ira, publicado por Alambique Editorial en 2017, Kodoku Shi – Muerte Solitaria, publicado por Alambique Editorial en 2019, Hikikomori - Dejarse morir, publicado por Sión Editorial en 2021, Breve descripción del caos, publicado por Proyecto Editorial La Chifurnia en 2022 e Insípido sueño de una noche sin pastillas, publicado por Editorial BRG en 2022. Ha participado en diferentes antologías impresas: como Literatas que Dan Lata en 2013, El Abismo por madrugadas en 2016, Tierra Adentro en 2017, Poetizar y U-poética, ambas en 2018, Cora...