
El juego de las puertas
01/27/25 • 55 min
1 Oyente
En ocasiones, nuestro anhelo de conocer la voluntad de Dios suele mezclarse con nuestros deseos personales, y tratamos de manipularlo a Él para que nos diga qué hacer o qué puerta atravesar. Queremos Su garantía para sacarnos de encima la responsabilidad de la decisión. Sin embargo, tomar decisiones es una herramienta indispensable para desarrollar nuestro carácter. Una puerta abierta no significa una vida fácil, una puerta cerrada no necesariamente marca un punto final. Es tiempo de agradecer por todas las puertas que tenemos frente a nosotros: las que se abren, las que se cierran, y las que nunca se abrirán.
En ocasiones, nuestro anhelo de conocer la voluntad de Dios suele mezclarse con nuestros deseos personales, y tratamos de manipularlo a Él para que nos diga qué hacer o qué puerta atravesar. Queremos Su garantía para sacarnos de encima la responsabilidad de la decisión. Sin embargo, tomar decisiones es una herramienta indispensable para desarrollar nuestro carácter. Una puerta abierta no significa una vida fácil, una puerta cerrada no necesariamente marca un punto final. Es tiempo de agradecer por todas las puertas que tenemos frente a nosotros: las que se abren, las que se cierran, y las que nunca se abrirán.
Episodio Anterior

La casta, la chusma y los otros
La religión es seductora porque es un sistema que nos permite sentirnos parte de una “casta especial” y medir cuán buenos somos con respecto a “la chusma”, a los demás. Pero Jesús, no hace distinción entre nosotros. Él nunca sucumbió al prejuicio, del “grupo de pertenencia”; de hecho, resumió todo cuando dijo: “Amen a sus enemigos y oren por quienes los persiguen, para que ellos sean hijos del Padre que está en el cielo. Él hace que salga el sol sobre malos y buenos, y que llueva sobre justos e injustos”. Si queremos ganar al mundo, necesitamos limpiar el mensaje de salvación, liberándolo de nuestros sesgos doctrinales. ¡Seamos libres de la religión artificial con esteroides!
Siguiente Episodio

La ley del gallinero
La ley del gallinero puede darse en una granja, pero no es válida en el Reino. Cuando sintamos que somos la gallina ‘omega’, debemos recordar que no estamos solos. Al igual que David ante el tormento de Saúl, debemos permitir que sea Dios el fundamento sobre el cual nos ponemos de pie. Actuemos conforme a Su Palabra, sin rencores ni venganzas, sino con gracia y perdón. Si Dios puede confiar en que haremos lo correcto cuando nuestro Saúl está en el trono, también puede confiar en que lo haremos cuando seamos nosotros quienes ocupemos ese lugar.
Si te gusta este episodio, te encantará
Comentarios del Episodio
Generar una insignia
Obtén una insignia para tu sitio web que enlace a este episode
<a href="https://goodpods.com/podcasts/dante-gebel-live-248627/el-juego-de-las-puertas-83005011"> <img src="https://storage.googleapis.com/goodpods-images-bucket/badges/generic-badge-1.svg" alt="listen to el juego de las puertas on goodpods" style="width: 225px" /> </a>
Copiar