
Da con alegría
04/30/22 • 4 min
1 Oyente
Algunos te dirán que necesitas “dar hasta que duela”. No lo creas. Dios no quiere regalos entregados con sufrimiento. ¡Él quiere regalos ofrecidos con gozo! De hecho, ésas son las únicas dádivas que a Él le agradan.
Es por eso mismo que Dios añadió Su promesa de abundancia a Su mandato de dar con alegría. Ambos están conectados.
La llave que abre la tesorería de Dios es una ofrenda gozosa, llena de fe y regocijo. ¿Has visto alguna vez un grupo de personas dando de esa manera? Yo lo he visto. Nunca lo olvidaré. Hace algunos años estaba en una campaña cuando el tiempo de la ofrenda se convirtió en una celebración sobrenatural y espontánea. Kenneth entonaba el canto llamado “Bread upon the water” (Pan sobre el agua), y la gente danzaba por los pasillos mientras se acercaban a ofrendar. El gozo en ese lugar fue maravilloso. Sanidades y milagros grandiosos sucedieron esa noche.
Pero lo que más me impresionó fue la forma alegre y entusiasta en que la gente trajo sus ofrendas a Dios. La ofrenda no era extraída de ellos como cuando un dentista extrae una muela. La ofrecieron alegremente.
El concepto de “dar hasta que duela” no proviene de Dios. Él prefiere que le des diez pesos con esa clase de regocijo que veinte con dolor. En 2 Corintios 8:11-12 (NVI), el apóstol Pablo insta a la iglesia de Corinto a dar con buena voluntad. Buena voluntad. ¡Eso es lo que Dios busca!
Si no has dado de esa manera en el pasado, toma la firme decisión de comenzar a hacerlo. Arrepiéntete de las veces en que has dado de mala gana. Luego, pasa un tiempo especial en oración con Dios y Su Palabra, para que la próxima vez que ofrendes, lo hagas con un corazón dispuesto.
Olvídate del “dolor” de dar. Sé un dador alegre, gozoso y dispuesto. Créeme—¡tus bendiciones abundarán!
Lectura bíblica: 2 Corintios 9:6-15© 1997 – 2019 Eagle Mountain International Church Inc., también conocida como Ministerios Kenneth Copeland / Kenneth Copeland Ministries. Todos los derechos reservados.
Algunos te dirán que necesitas “dar hasta que duela”. No lo creas. Dios no quiere regalos entregados con sufrimiento. ¡Él quiere regalos ofrecidos con gozo! De hecho, ésas son las únicas dádivas que a Él le agradan.
Es por eso mismo que Dios añadió Su promesa de abundancia a Su mandato de dar con alegría. Ambos están conectados.
La llave que abre la tesorería de Dios es una ofrenda gozosa, llena de fe y regocijo. ¿Has visto alguna vez un grupo de personas dando de esa manera? Yo lo he visto. Nunca lo olvidaré. Hace algunos años estaba en una campaña cuando el tiempo de la ofrenda se convirtió en una celebración sobrenatural y espontánea. Kenneth entonaba el canto llamado “Bread upon the water” (Pan sobre el agua), y la gente danzaba por los pasillos mientras se acercaban a ofrendar. El gozo en ese lugar fue maravilloso. Sanidades y milagros grandiosos sucedieron esa noche.
Pero lo que más me impresionó fue la forma alegre y entusiasta en que la gente trajo sus ofrendas a Dios. La ofrenda no era extraída de ellos como cuando un dentista extrae una muela. La ofrecieron alegremente.
El concepto de “dar hasta que duela” no proviene de Dios. Él prefiere que le des diez pesos con esa clase de regocijo que veinte con dolor. En 2 Corintios 8:11-12 (NVI), el apóstol Pablo insta a la iglesia de Corinto a dar con buena voluntad. Buena voluntad. ¡Eso es lo que Dios busca!
Si no has dado de esa manera en el pasado, toma la firme decisión de comenzar a hacerlo. Arrepiéntete de las veces en que has dado de mala gana. Luego, pasa un tiempo especial en oración con Dios y Su Palabra, para que la próxima vez que ofrendes, lo hagas con un corazón dispuesto.
Olvídate del “dolor” de dar. Sé un dador alegre, gozoso y dispuesto. Créeme—¡tus bendiciones abundarán!
Lectura bíblica: 2 Corintios 9:6-15© 1997 – 2019 Eagle Mountain International Church Inc., también conocida como Ministerios Kenneth Copeland / Kenneth Copeland Ministries. Todos los derechos reservados.
Episodio Anterior

No dejes que el diablo te engañe
«Cuando [el diablo] habla mentira, habla de lo que le es propio; porque es mentiroso y padre de la mentira» (Juan 8:44)
Para algunas personas es difícil creer en las promesas de Dios porque han visto muchas cosas en el mundo natural que parecen contradecirlas. Han visto diezmadores fieles irse a la quiebra. Han visto cristianos enfermos que no han recibido sanidad.
En realidad, sería más exacto decir que piensan que han visto esas cosas. Esto sucede porque, en el mundo, hay un engañador muy activo. Un impostor que con diligencia ha estado haciendo el mismo trabajo desde el huerto de Edén: engañando a la humanidad para que crea que la Palabra de Dios es una mentira.
Y después de maquinarlo por miles de años, lo ha perfeccionado. La próxima vez que él diablo trate de hacerte ver las cosas como si la Palabra de Dios no fuera a obrar en tu vida, piensa en eso; cuando te haga ver que toda esperanza está perdida, dile: “No me preocupan las apariencias. Yo creo en la Palabra y rechazo toda duda”.
Déjame mostrarte lo que quiero decir. ¿Has visto un espectáculo de magia donde alguien se mete dentro de un cajón y luego lo parten por la mitad con una sierra? Puedes verlo con tus propios ojos. Los pies de la persona salen por un lado del cajón y su cabeza se asoma por el otro, el cajón queda dividido en dos. Entonces, el mago une las dos mitades, y la persona que estaba en el interior del cajón salta fuera del el.
Ahora dime, ¿de verdad creíste, aunque sea por un instante, que a esa persona la cortaron por la mitad? ¡Claro que no! Sabías que habías visto un truco, un engaño, algo que parecía de cierta manera cuando, en realidad, era de una forma completamente diferente. Quizás no sepas cómo se hizo. Tal vez no seas capaz de explicarlo. Pero sabes que a una persona no pueden cortarla por la mitad y luego volverla a unir.
De esa manera debes pensar con respecto a la Palabra de Dios. Necesitas aprender a confiar y a depender de ella, a tal punto que cuando Satanás te muestre algo en el mundo natural que parezca contradecirla, puedas decir: “Bueno, yo vi eso, pero no voy a ser tan insensato para creerlo. Yo sólo creo la Palabra de Dios”.
Si haces eso, el padre de mentira nunca podrá engañarte.
Lectura bíblica: Salmos 119:89-104© 1997 – 2019 Eagle Mountain International Church Inc., también conocida como Ministerios Kenneth Copeland / Kenneth Copeland Ministries. Todos los derechos reservados.
Siguiente Episodio

Bendice al Señor
Por lo tanto, ofrezcamos siempre a Dios, por medio de Jesús, un sacrificio de alabanza, es decir, el fruto de labios que confiesen su nombre» (Hebreos 13:15)
Grandes cosas suceden cuando confiesas continuamente la misericordia de Dios. La fe crece en tu interior. Esa realidad de que Dios te ama empieza a manifestarse por medio de tu espíritu. Es más, honras a tu Padre cuando confías en Su Palabra, cuando magnificas Su amor y Su misericordia, cuando hablas de Su bondad y Su benignidad, y cuando das testimonio de que Él es un Padre amoroso que hace sólo el bien. Dios es bendecido cuando lo alabas por ser Él el gran Dios del universo que quiere bendecirte y que dio a Su Hijo a causa de Su gran amor por el mundo. David era un hombre conforme al corazón de Dios y sabía cómo alabar al Señor. No es hasta que tienes la Palabra De Dios morando en ti ricamente que puedes declarar desde tu propio espíritu salmos y alabanzas. Utiliza las alabanzas de David para magnificar al Señor. Decláralas o cántalas en voz alta al Padre. Si pones las palabras de Dios continuamente en tus labios, empezarás a sentir la emoción y el gozo de saber que Dios es “rico en misericordia” por el gran amor con que nos amó. Tu fe se remontará a nuevas alturas. ¡Tu Padre será bendecido!, y tú también lo serás.
Lectura bíblica: Salmos 89:1-18© 1997 – 2019 Eagle Mountain International Church Inc., también conocida como Ministerios Kenneth Copeland / Kenneth Copeland Ministries. Todos los derechos reservados.
Si te gusta este episodio, te encantará
Comentarios del Episodio
Generar una insignia
Obtén una insignia para tu sitio web que enlace a este episode
<a href="https://goodpods.com/podcasts/audio-devocional-crezcamos-de-fe-en-fe-ministerios-kenneth-copeland-127525/da-con-alegr%c3%ada-20799996"> <img src="https://storage.googleapis.com/goodpods-images-bucket/badges/generic-badge-1.svg" alt="listen to da con alegría on goodpods" style="width: 225px" /> </a>
Copiar